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Pedro Tres, 41 años cantando…

“El público es el dueño y señor de todo lo que hacemos, todo gira en torno a él, y sin él no somos nada”

 

Hace unos días, me reuní con Pedro Tres en el café Iruña para tener una entrevista-conversación con él. Después de más de 40 años subiendo al escenario para animar las fiestas de casi toda la geografía estatal, va y lo deja sin hacer ruido, asi que creo merecía desde nuestro modesto medio de comunicación, que algo se hiciera.

Con más de dos horas de conversación, me ha sido difícil elegir que poner en estas letras, ya que todo lo que Pedro me ha contado ha sido interesante, pero tratare de resumirlo, y por supuesto conservare la grabación porque os aseguro que da para escribir mucho más.

Pedro, “pamplonés de Andosilla” porque allí nació, se pone a hablar y disfruta haciéndolo en la misma medida que yo lo hago escuchándole. Me cuenta sus primeros contactos con la música a mitades de los 60 como la mayoría de su generación a través de la escolanía Tibidabo del colegio seminario de Girona donde estudio. Su participación por casualidad en un Festival de la Canción Blanca que allá se organizaba, se rio de un compañero que por lo visto no lo hacía demasiado bien, y el profesor le dijo “si lo sabes hacer mejor adelante” y canto “De qué color es la piel de Dios” del grupo Viva la Gente que era lo que se escuchaba por aquel entonces.

Pasados los años de estudio y a través de amigos del ambiente musical de Burlada, conoció al maestro “Girones” que le animo a que cantara en algún grupo, no recuerda el nombre de ese primer grupo, pero ese fue el germen. A partir de ahí, vinieron “Los Alfas” y la que ya se convertiría en su primera orquesta profesional “Nueva Alaska”. Recorrió junto con sus compañeros varias ciudades y países del mundo, Teherán, Lagos en Nigeria y otros. A la vuelta de esos viajes, allá por 1978, es llamado para formar parte de “Nueva Etapa” pero en un primer momento la respuesta fue no, porque quería respetar el compromiso que había adquirido con sus compañeros de Nueva Alaska.

Al final, lo recuerda perfectamente, el 8 de marzo de 1978, comienza su nueva etapa en la vida y se convierte en el cantante de Nueva Etapa, seis años después de la formación de la orquesta en 1972 por cuatro músicos de la Orquesta Amanecer.

También con Nueva Etapa ha conocido Suecia y Finlandia, por ejemplo.

El oficio de músico o cantante de una orquesta, es un trabajo duro, nos dice, lo que se ve en el escenario es bonito, pero es el resultado de muchas horas de trabajo y ensayos, de kilómetros y kilómetros de viajes por carreteras de todo tipo y normalmente por la noche. Dedicarse a la música, es un trabajo como cualquier otro, hay que tener vocación y te tiene que gustar, pero todo lo compensa la salida al escenario. Todo se cura cuando lo pisas, y este “animal de escenario” como el mismo se denomina, lo ha experimentado muchas veces a lo largo de estos 41 años. Que el recuerde, solo una vez dejo de salir al mismo, y porque tenía 40 de fiebre y una neumonía, y aun asi y todo fue porque lo ingresaron en el hospital.

Intercaladas en la conversación nos va contando anécdotas, ha visto a compañeros llorando antes de salir por el fallecimiento de un ser querido, pero dándolo todo para que el público se divierta, o nos cuenta una vez en la que su esfínter le jugó una mala pasada vestido de blanco impoluto, lo que le obligó a retirarse del escenario andando para atrás como los buenos árbitros de futbol, son cosas que no pasan en trabajos habituales, pero en el suyo, “el espectáculo debe continuar” …

“En esta entrevista quiero decir gracias porque Nueva Etapa ha sido mi vida, cuando sales al escenario no vas pensando en lucirte, sales para divertir a la gente, y si lo hacen te dan la oportunidad de ganarte la vida, a quien de verdad hay que dar las gracias, es al público, algunas veces se nos olvida que sin ellos no somos nada. Puedes tener los mejores músicos y artistas sobre el escenario, pero si al público no le gusta, no hay nada que se pueda hacer.”

Cuando llevas tantos años y además repitiendo en muchos pueblos y ciudades, haces amistades personales con gente, pero incluso el público es también tu amigo. Eres parte de sus fiestas, casi no las conciben sin ti, y eso es algo muy grande. Ya sabes lo que les gusta, hay una especie de complicidad entre ellos y la orquesta y eso hace que el espectáculo fluya. Decía uno de los grandes músicos de esta tierra ya fallecido, José Miguel Huarte “Pacha”, que la mejor canción que toca una orquesta, es la que le gusta al público. Janio Martí, nuestro padrino en Cataluña, decía que la música comercial, empieza por “comer” la música que te da de comer, si hago la música que a mí me gusta, quizá no sea la que el público prefiera, y repito una vez más que el público es el que manda.

El repertorio es algo fundamental en las orquestas, cuando eres un artista conocido, ya tienes tu repertorio y lo vas incrementando año a año, pero tus fans siempre te piden las canciones más conocidas. Las orquestas tienen que renovar el repertorio cada año, o de lo contrario no gustan a la gente. Por supuesto que hay un repertorio base, pero lo importante es lo que se va añadiendo al mismo. Además, en cada lugar en el que actúas gusta algo diferente, por lo que no puedes llevar un repertorio cerrado y has de ir viendo cómo va el ambiente y elegir, normalmente en las orquestas hay siempre alguien que se encarga un poco del tema.

Nueva Etapa, ha sido embajadora de Navarra allá donde ha ido, nunca ha faltado el repertorio sanferminero, y para dejar constancia de ello, en el año 1998 grabamos el disco “Fiesta Sanferminera” Homenaje a Manuel Turrillas. Un trabajo totalmente reconocible de la orquesta con la voz inconfundible de Adelaida y los arreglos musicales de “Pacha”. Pedro se emociona cuando hablamos de él, y recordamos también algunas anécdotas de aquella grabación. Hoy sigue siendo uno de los discos que más se escucha durante las fiestas de San Fermín. Además, tuve la suerte (Peio) de poder colaborar en una de las canciones, “Aquí Radio Falces”.

Y una vez que nos ponemos a hablar de San Fermín, no podemos dejar de hablar de uno de los que yo creo que es el primer acto Sanferminero aunque se haga 8 días antes de que estalle el “Txupinazo”, es ni más ni menos, que la verbena que se celebra cada año con motivo de la Sampedrada en el club natación de Pamplona, y que reúne a más de 5.000 personas que ya no pueden esperar para derrochar alegría, un acto con muchos años de tradición y casi exclusivo de los pamploneses y pamplonesas y en el que la orquesta y el mismo Pedro llevan participando cada año. Pedro vuelve a emocionarse al recordar tantas cosas de esa noche.

Quizá este año sea la “penúltima” vez que podamos ver a Pedro con la orquesta en el escenario, y creo que será un buen momento para que reciba ese gran aplauso que tanto se merece.

Aunque no se lo he preguntado, hay una cosa que quiere decirme, y yo faltaría más le digo que adelante. “En estos momentos, la política está muy presente en nuestras vidas, pero yo siempre he dicho que cuando se sale a un escenario, hay que actuar para todos, para los que piensan como tú y también para los que no, no hay distinción política en el público que va a una verbena, quieren divertirse y nuestra obligación es que lo hagan”.

 

En todo el tiempo que hablamos, la palabra que más se repite es “público”, todo lo que Pedro me cuenta es en torno a él, “todo lo que hemos hecho siempre es para agradarle”, y me repite una y otra vez que el público es lo importante. Y aunque habla de el en general, tiene claro que en estos años precisamente lo que más ha cambiado es el tipo de público que acude a las verbenas,” cuando empezamos, las canciones lentas no podían faltar y ahora si tocas una te bajan del escenario a gorrazos dice entre risas. Había mucho pasodoble, incluso algún tango, vals. Hubo unos años en los que las verbenas se vaciaron”  el piensa que fue porque a las orquestas les costó readaptarse.

Se queja un poco Pedro de que el trato algunas veces no es demasiado correcto, el músico es parte de la fiesta, y a veces se vuelve invisible, se le oye, pero se le considera un acto más del programa sin tener en cuenta que lo que hace le encanta, pero es muy duro. Parte de culpa dice, la tenemos nosotros mismos, porque más que compañeros con otras orquestas, somos competencia, deberíamos estar más unidos y reivindicar lo que es nuestro. El trato al músico ha cambiado mucho. Hoy en día todos los que suben al escenario están sobradamente preparados, pero el trato no corresponde en la mayoría de los casos a su preparación”.

“Pese a todo, me considero un hombre afortunado, me he ganado la vida con algo que me encanta y eso es un privilegio. Mi familia siempre me ha apoyado, aunque mi padre al principio no quería que me dedicase a esto, “búscate un trabajo como Dios manda”, me dijo, pero al final se convirtió en mi mayor seguidor y también en mi peor crítico, y sé que se sentía orgulloso de mi”. Recuerda también el apoyo incondicional de su hermana.

Y tiene un recuerdo muy especial y quiere recalcarlo, de su compañera de escenario de tantos años, Adelaida, “dejo la orquesta al igual que yo, de una manera silenciosa, sin menospreciar a ninguno de mis compañeros, creo que ella ha sido la artista más grande que ha pasado por la orquesta, es más, mientras ella estuvo, era Adelaida y la orquesta Nueva Etapa. Su preciosa voz y su manera de estar en el escenario, eran un don natural que solo los elegidos tienen. Teníamos tanta complicidad que mucha gente pensaba que éramos pareja también en la vida real, y eso solo puede hacerlo creer alguien que domina las tablas e interpreta las canciones como solo ella sabía hacer”.

Repite una y mil veces que se siente orgulloso de sus dos familias, la de padres, mujer e hijos, y la de Nueva Etapa.

“A pesar de los 41 años saliendo al escenario, cada día me sentía como si fuera el primero, y un poco eso es este oficio, cada día empiezas de nuevo, lo que hiciste ayer ya no está, el público de hoy nada tiene que ver con el de ayer ni con el de mañana. Es increíble, dice, como por ejemplo canciones que las has cantado 40.000 veces de pronto se te olvida la letra y sigues y ya está, pero eso es consecuencia de la responsabilidad que sientes cada vez que te enfrentas al público, (el público una vez más…)

¿Qué ha sido la música para ti?

Sin dudar un instante me contesta, “mi vida, mi vida, la música lo ha sido todo para mí, nunca hubiera pensado cuando salimos de mi pueblo a buscar trabajo, que gracias a ella iba a llegar a donde he llegado. Nueva Etapa es mi familia, Jesús, Adelaida, Chibino, Fernando, no solo en el escenario, hemos compartido nuestras vidas junto con nuestras familias también fuera de él. Nos íbamos juntos de vacaciones durante muchísimos años” y lo vuelve a repetir “es que es mi familia, actualmente hablo con ellos casi a diario, nos vamos a comer juntos, todas las cosas importantes de la vida, tristes o alegres, las hemos compartido y vivido juntos, es mi familia, la familia que se elige, o, mejor dicho, yo tuve la suerte de que ellos me eligieran a mí, no sé qué hubiera sido de mi vida, les doy las gracias de verdad. He estado ahí, me he ganado la vida, la gente me reconoce y me abraza, no puedo pedir más. Hay gente que me comenta, conocí a mi mujer bailando con tus canciones, cosas muy bonitas por eso no puedo más que decir gracias, gracias y más gracias.”

¿Y ahora que Pedro?

“Pues ahora comienza una nueva etapa otra vez para mí, aunque seguiré ligado a la orquesta de una forma u otra, y no descarto en caso de que me necesiten, volver a subir al escenario. Estoy liado con alguna cuestión teatral, me encanta el teatro, me divierto mucho en el escenario y no puedo dejarlo. Por supuesto disfrutar a tope de cosas que antes no he podido, de mi otra familia, de mi mujer de mis hijos de mis nietos, voy a volver a ser abuelo…”

 

Terminamos la conversación dándonos las gracias mutuamente, aunque soy yo el que tiene que dárselas, por su carrera, por su buen hacer, por considerarme miembro de su familia musical, en definitiva, por todo lo que Pedro y la orquesta Nueva Etapa, han significado para la música en Navarra.

 

Escrito por Peio Etxarri

Director de Ferminmusic

Esta entrada tiene 4 comentarios

  1. El gran pedro buena persona y con una voz privilegiada, si lo conozco,yo tambien he sido bateria y cantante d “Noche y Dia” puedo suscribir todo lo que dice pues es la verdad del musico de orquesta.Te deseo que disfrutes de tus aficiones y familia pero sin dejar la musica del todo yo todos los dias canto un buen rato y no me va mal.Un fuerte abrazo Pedro y que seas moderadamente feliz.

  2. Que disfrutes de tu merecido descanso. Yo crecí con Nueva Etapa cuando venían a las fiestas de mi pueblo y me tenían loca!!! Me encantaban,tanto que mi hermana pequeña de llama Adelaida. Un abrazo .

  3. Gracias,Elena , Ricardo,,
    Sois muy amables,
    Ricardo dejo de viajar,la música nunca,el escenario es mi hábitat,
    Y seguiré haciendo cosas.
    Elena,mi compañera Adelaida dejo una gran huella en el público y conozco más casos de poner su nombre.
    Un gran abrazo,,
    Mil gracias

  4. Pues resulta que andaba dando vueltas por Google y va y me sale esta información (ya un poco antigua) y no he podido resistirme a leerla. La dichosa nostalgia de aquellos años, de aquellas tardes en el Club Natación con la cuadrilla bailando con Nueva Etapa. Los chavales boquiabiertos con Adelaida y las muchachas babeando con ese cantante del bigote tan guapetón. Alguna vez llegué casi al cabreo con mi novia de entonces, harto de escucharla “lo bueno que está Pedro”. Jajaja. Qué tiempos!!

    Hoy, con la perspectiva de los años, sólo queda agradecerte, Pedro, a ti y a toda la orquesta, los buenos momentos que pasamos con vosotros. El recuerdo que me queda dibuja una sonrisa en mis labios y no creo que mi memoria me engañe pero ahora mismo estoy pensando: coño… si es que eran muy buenos músicos, era una gran orquesta.

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